Capitulo 29

CAPÍTULO 29

JUEGO SUCIO

BELLA
Vi salir a Jacob de bosque, no podía creer que vaya a ganar. Me sentí tan aliviada al ver a Edward unos metros detrás, mi respiración se detuvo y me levanté de mi asiento.
"Jacob Black y Edward Cullen a la vista a 250 metros de la línea final" oí por el altavoz, todos los jueces corrieron a la meta, la gente alrededor se acercó a la llegada.
Muchos gritaban, silbaban yo no podía ni hablar. Poco a poco Edward fue rebasando a Jacob y a sólo unos metros le sacó ventaja.
Quería saltar y gritar de alegría. Por fin después de años Jacob era derrotado y no podría estar en la competencia final. Salvo que… no iba a pasar, sólo faltaba una prueba dónde podría presentarse y Sam era el mejor en vencidas que había en el pueblo.
Me fijé en Edward con más detenimiento mientras bajaba del caballo, su camiseta estaba manchada, en uno de sus brazos había ¿sangre?
Quise bajar de inmediato a cerciorarme pero me contuve, tal vez la carrera fue más violenta de lo que creía. A unos metros Jacob le gritaba a Quil y Embry. Los jueces y más gente de La Push llegaron en varios autos y camionetas.
Unos minutos después bajé a premiarlo, Edward se había cambiado, estaba con una camiseta negra que le quedaba mejor que la anterior.
Él me señaló su caballo para premiarlo primero, deslicé el collar de flores que yo misma había hecho esa mañana. Luego le puse la medalla a él, mis manos rozaron su cabello y su pecho al ponérsela, retrocedí un paso rápido. No quería que los demás notaran lo ansiosa que estaba.
Todos llegaron a felicitar a Edward, regresé a mi lugar, rogaba que mañana él ganara y pudiera… no papá me mataría si se enteraba.
Confiaba en que Edward se portaría como el caballero que es.
Vi a Leah a lo lejos, regresaba del estacionamiento y parecía estar llorando.
Ella era tan fuerte, casi nunca mostraba debilidad, yo era la llorona en casa. Debía ser algo muy grave para que ella estuviera así. Sé que preguntarle sería como hablar con una pared pero trataría de ser su amiga otra vez, yo realmente la quería, ella había sido como una hermana toda mi infancia.
Ojala Jacob no tenga nada que ver en esto.
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JACOB BLACK
Maldito Cullen, estúpidos Quil, Embry y Brady. Y de Kevin y Randall ni sus luces. Pero el que si me las pagaría y pronto sería Collin, le daría una buena lección para que sepa quién es el que manda.
—Jake— Embry llegó corriendo seguido de Quil.
—Oye jefe, lo sentimos— no tenía intenciones de escuchar las estúpidas excusas de este par de tontos.
— ¡Lárguense!— les grité.
—Jake tuvimos un accidente, fue como si Cullen nos hubiera leído la mente, cuando dieron la partida no se movió— estuvieron quejándose de todo.
— Lárguense o los golpearé aquí mismo— los dos idiotas se fueron corriendo y me senté a esperar a Billy.
Al cabo de un rato llegó.
— ¿Jake? ¿Qué paso hijo?
— ¿Qué crees papá? ¿Si hubiera ganado estaría aquí?
—Caray, ese infeliz es mas rival de lo que esperaba— reflexionó el viejo.
No era más rival que yo, sólo era… suerte.
—Ahora ya no competiré en la prueba final— me lamentaba, y será el imbécil de Whitlock quien gane, seguro sus amigos tenían todo arreglado.
—Todavía podemos hacer algo, falta una competencia— decía mi padre.
¿La competencia de vencidas? Sam estaba en su mejor momento, no quería que vuelva a humillarme en público… suficiente con un golpe al orgullo por hoy.
—Sam es invencible, yo pude ganarle el otro día.
—Sólo preséntate yo lo arreglo—mandó el viejo. Sam no aceptaría sobornos, era demasiado recto para eso.
—Papá no me obligues a hacer el ridículo— me quejé otra vez.
—Obedece. Ve a cambiarte y preséntate en media hora, todo estará arreglado— habría que confiar en Billy, después de todo no era el jefe por nada.
Salí de allí antes de que premiaran al imbécil de Cullen. Caminé hasta mi auto para tomar otra muda de ropa.
—Jake ¿Te vas?— Leah llegó corriendo
—No. ¿Qué quieres?— con qué me vendría ahora.
—Voy a participar luego en la competencia de atrapa sueños ¿No quieres ir a verme?— esta niña a veces era tan molesta. No tenía quejas de ella en la cama, así que supongo que interesarme de vez en cuando en lo que hacía sería lo justo.
—Esas son cosas de chicas pero me daré una vuelta por allí— no le prometí nada.
—Jake tengo que decirte algo pero tengo miedo— otra vez las lágrimas, acaso las mujeres tienen una poza de agua en el cerebro que nunca se seca.
—Más te vale que no me digas que ayudaste a alguno de esos idiotas hoy o te juro…
—Jake… yo… estoy… estoy embarazada— la noticia me cayó como un yunque en la cabeza. Me impactó más que perder la carrera.
— ¿Qué estás diciendo? Bromeas verdad…— si bromeaba es que tenía un sentido del humor muy negro.
—No es broma, me hice una prueba de embarazo para confirmarlo ayer. ¿Qué vamos a hacer?— no entendía para qué me necesitaba a mí.
— ¿Vamos? ¿Por qué me incluyes a mí en esto? ¿No me dijiste que tomabas la píldora?— volvió a soltar más lágrimas.
—Si la tomaba pero creo que se me olvidó un par de días. ¡Jake es tu hijo!— obvio que era mío, ella sólo ha estado conmigo.
—Leah, me voy a casar con Bella en un par de meses, no puedo asumir esto ahora, si Charlie se entera me mata— o me castra, mi futuro suegro se había hecho cargo de Leah cuando quedó huérfana, también la veía como una especie de hija.
—No me dejes sola, yo te quiero Jake, no me des la espalda— me abrazó pero la rechacé, no quería que me vieran así con ella.
—Ok te apoyaré. Yo lo pago. Te acompañaré a Port Ángeles el próximo fin de semana lo arreglaremos— eso sí debía tranquilizarla.
— ¿Qué? ¿No quieres al bebé? ¿Me estás pidiendo que lo mate?— otra vez el llanto, rayos.
—Ahora no es un bebé, es solo un montón de células ¿No has prestado atención a las clases de Biología?
—Pero ya tengo más de un mes— solo células me repetía a mí mismo, eso no era un ser humano.
—Sólo es una masa amorfa. Si no te operas, no te apoyaré más, me alejaré de ti y me negaré si dices que es mío— la amenacé.
—Jake no me puedes hacer esto— parecía que se iba a derretir de tanto llorar.
—Es tu decisión linda. Yo no puedo ser padre ahora. Si quieres lo intentamos más adelante, quizás cuando me divorcie.
— ¡Ni siquiera estás casado!— me gritó.
—No me hables así, me voy casar con Bella así sea lo último que haga y tu ni nadie echarán a perder mis planes. Estoy así de lograrlo. ¡El fin de semana que viene te llevaré a la ciudad y ni una palabra de esto a nadie!— le grité furioso. Le di la espalda y corrí a cambiarme.
Todo parecía andar en mi contra.
—Date prisa hijo, estás inscrito. Sólo tienes que derrotar a un par de tontos— me alcanzó Billy.
— ¿Convenciste a Sam?
—Digamos que él tiene su punto débil— papá era tan listo, admiraba eso de él.
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EDWARD
Después de la premiación nos quedamos un rato más. La competencia de velocidad fue ganada por Ben Chenney. Y tuvimos que convencer a Emmett de no participar en la competencia de vencidas, ya había ganado otra prueba y no era justo para los demás participantes, todos deberían tener la misma posibilidad.
"Todos los inscritos para la competencia de Fuerza de Brazos, presentarse en el terreno de juego" oí por el altavoz. Em lloriqueó a nuestro lado.
Nos acercamos a ver, había dos mesas acolchadas en algunos puntos y con salientes a los lados, seguro para hacer fuerza con el otro brazo, estas eran especiales, no como las del Pub.
Fueron llamando de por parejas, casi todos los participantes eran quileutes pero el más grande y fuerte era claramente Sam Uley. Me sorprendió ver a Black también compitiendo, Uley lo había derrotando antes, seguro lo haría de nuevo.
Me distraje un momento mirando a mi novia que se veía aburrida en su asiento, quería subir y hacerle compañía.
"Mañana" me repetía constantemente. "Mañana nadie podrá detenerme"
"Los finalistas para la prueba de Fuerza de Brazos son: Sam Uley y Jacob Black" escuché por los altavoces… eso tenía que verlo.
Me acerqué lo más que pude, me costó abrirme campo pues había mucha gente.
Ambos contrincantes estaban parados al lado de una de las mesas. Sam parecía tener la mente en otro lugar y Black estaba demasiado feliz.
— ¡Comiencen!— gritó el juez.
Los dos competidores se sentaron pero Sam no puso el brazo sobre la mesa.
—No te dejaré vencerme. Me largo de aquí— dijo Uley levantándose, todos nos quedamos de una pieza, no entendíamos lo que pasaba...
— ¿Tienes miedo Sam?— lo retó Black.
—No de ti mocoso. ¿Quieres la medalla? Pues que la aproveches— salió de allí a grandes zancadas. Uno de los jueces lo alcanzó y cruzaron unas breves palabras.
"Jacob Black gana la competencia por walk over, el otro competidor se ha retirado" anunciaron.
No entendía nada, Black sonreía satisfecho. Fui detrás de Sam para asegurarme, Jasper iba un paso delante de mí.
—Sam, Sam, detente— exigió mi amigo.
—Lo siento, no quiero ser grosero pero no me molesten— se volvió el quileute.
— ¿Qué pasó? ¿Por qué te arrepentiste?— le pregunté.
—No puedo ganarle ¿Ok?
—Te han amenazado verdad— Jasper parecía muy seguro de lo que decía.
—No se metan en esto es un lío de familia.
— Sam tú no eres ningún cobarde. Tú no te rindes ¿Por qué?— exigió Jazz.
— ¿Qué harías si tu novia estuviera en peligro? Esta no es más que una competencia, Emily lo es todo. Tal vez me la lleve de aquí. La Push está corrompido.
—Pero si te vas dejarás a los demás a merced de Billy y Jacob. ¿Eso es lo que quieres para tu gente?— Jasper era tan sagaz, no me había puesto a pensar en los problemas de los quileute.
—Estoy sólo Whitlock, los chicos no se atreven a seguirme por miedo.
—Tú eres un líder. No te rindas, pelea. Cuenta con nosotros para lo que necesites— se estrecharon la mano.
—Vamos a ver qué podemos hacer pero esta batalla la ganó Billy— se fue cabizbajo.
Ya me había dado cuenta de lo sucios que podían ser sólo por una competencia, pero esto era pasarse, la amenaza y la intimidación eran ruines.
Yo también resistiría sin dudar, no quería a Bella en peligro.
— ¿Lo convencieron?— Llegó Em corriendo.
—No vinimos a convencerlo— dijo Jasper.
—Rayos perdí todo lo que gané cuando aposté por Edward. Estaba seguro de que Sam le rompería el brazo a Black.
— ¿Eso has estado haciendo? ¿Apostando?— le gritó Jasper a Emmett.
—Quiero incrementar mis ingresos, mi bebita necesita un juego nuevo de lencería— puso su cara de cachorro otra vez.
Regresamos bromeando al terreno de juegos, Bella le ponía la medalla a Black, en un alarde de idiotez, él la tomó por la cintura e intentó besarla. Uno de los jueces le llamó la atención. Jasper me tomó del brazo.
—Ni se te ocurra hacer un escándalo o te delatarías. Calma amigo. Sam tiene razón, ganaron esta batalla pero no la guerra, déjalo que disfrute un poco de su tramposa victoria.
No quise quedarme más, quería ir a casa. Mañana lucharía con todas mis fuerzas para que ese imbécil no pudiera tocar a Bella, no lo dejaría poner sus sucias manos sobre mi novia.
Antes de subirnos a los autos vimos unos afiches rojos pegados en las paredes.

"EL GRAN JUEGO DEL AMOR.
Si tienes un grupo inscríbete en este divertido y didáctico juego; demuestra cuánto sabes de tu sexualidad.
Moderador: Richard McCarthy"

Seguí leyendo cada vez más intrigado para saber de qué se trataba y porqué el señor oso, padre de Em estaba involucrado en esto.

Sólo se aceptarán grupos de tres personas*.
Cada grupo deberá escoger un nombre cariñoso o sexual.
Deberán ser amigos o conocerse bastante ya que se cruzarán respuestas.
No se permitirá lenguaje obsceno o frases en doble sentido.
Están prohibidas las demostraciones explícitas de la anatomía personal.
Inscripciones abiertas, hasta el medio día del domingo.
Lugar: Gimnasio del colegio.
Entrada: 5 dólares (para los que no participan) los fondos recaudados serán utilizados para ampliar el laboratorio de la escuela.

* La competencia es solamente masculina.

Esto era de película, seguro el mismo Charlie Swan puso esas reglas y prohibiciones y también le pusieron precio para que no asistan muchos chicos, grave error, lo difícil o prohibido siempre atrae más, díganmelo a mí que justamente tenía que enamorarme de la hija del enemigo de mi padre.
—De lujo. ¿Papá sera el que llaman El Doctor Amor?— Emmett estaba feliz.
—Para esto no te ayudará el Kamasutra, osito, tendrás que repasar los libros de anatomía y fisiología reproductiva— se burló Jazz.
—Eso debo verlo. ¿Emmett leyendo un libro sin pornografía?— yo también me burlé.
—Es mi campo tigres, ustedes están celosos porque de los tres el único que se ha estrenado soy yo— dijo muy orgulloso.
—Vamos a repasar, tendremos que elegir un nombre para nuestro grupo y hacernos preguntas morbosas para prepararnos— Jazz parecía tan asqueado como yo.